Telas de terciopelo
El terciopelo es el rey de la elegancia, por su aspecto sedoso, su tacto suave y su superficie brillante y cambiante. Su apariencia “antigua” combinada con colores de tendencia, como morados, rojos o azules, aporta una nota sofisticada. Para no recargar, no lo utilices en grandes piezas, sino en auxiliares y complementos.
Cortinas con faldón
No es necesario cambiar las cortinas: solo rematando su parte inferior con una tela más pesada y de un color más intenso, las ventanas ganarán presencia. Un detalle clave: deja que las cortinas descansen 15 cm sobre el suelo.
Vestir la mesa de comedor
No vistas tu mesa solo en grandes ocasiones, hazlo a diario. Si haces confeccionar un mantel que la cubra hasta el suelo, todo el comedor ganará estilo. La clave es elegir una tela de calidad, natural y con mucho peso. También puedes jugar con las superposiciones y combinar telas lisas y estampadas. Para asegurarte un resultado armónico, es mejor que el sobremantel sea liso y que uses una tela de flores, más gruesa, para el bajomantel.
Un truco de estilo: repite un tono del estampado en las flores del centro de mesa.
Piezas con capitoné
La presencia del capitoné en cualquier pieza tapizada suma enteros a la decoración, gracias al característico relieve que le confiere su acolchado a base de botones. de origen inglés, es el acabado tradicional de los sofás chéster y en la actualidad es una técnica de tapizado presente en todo tipo de asientos (sofás, butacas, pufs…). También puede aplicarse a una cabecero de tela, que con este acabado ganará peso decorativo, se verá más mullido y hará más acogedor el dormitorio.
Brillos dorados
Los matices dorados ponen una nota de lujo, a la vez que atrapan la luz y aportan calidez. Es importante dosificar su presencia y elegirlos en pequeñas dosis como el marco de un espejo o el ribete de una vajilla. Los acabados envejecidos son los más sofisticados.
Paredes con papel pintado
Enriquece tus paredes y enriquecerás la decoración. El papel pintado es la opción más habitual aunque también puedes optar por tela, si quieres conseguir una textura más cálida. El papel presenta como ventaja su facilidad de colocación y el amplio abanico de diseños, además de que las juntas delpapel se disimulan mejor que las de la tela y son menos delicadas.
Mezclar texturas
No tengas miedo a mezclar texturas, colores y estampados siempre que queden compensados. Para acertar, el truco es que el cojín estampado contenga alguno de los tonos de sus acompañantes y que los cojines de un color más intenso sean más pequeños que el resto.
FUENTE: http://www.elmueble.com/articulo/escuela_deco/4605/detalles_para_lograr_una_casa_mas_elegante.html?_part=3